Hay una cosa buena y una mala. La buena fue que recientemente la Policía Municipal que encabeza Julio Salas González logró, a través de la Policía Cibernética, rescatar (virtualmente) a dos menores de edad que fueron víctimas de dos pedófilos que engancharon a sus víctimas con los juegos de Free Fire y Roblox. Siempre es un precedente cuando se trata de salvaguardar, y sobre todo en esas circunstancias, a niños y niñas. El caso se mantuvo hasta cierto punto bajo reserva.
Fueron agentes analistas de la Policía Cibernética quienes comenzaron a investigar a una banda de pedófilos hondureños que operan desde ese país y pudieron “desconectar”, por así decirlo, a los dos menores de esas bandas, cuya intención es comercializar imágenes en todo el internet para depredadores.
Por fortuna, y no menos importante, no hubo ningún tipo de daño físico o contacto, además de que la CP rápidamente canalizó los casos para brindar contención a las familias.
Lo malo es que Chihuahua pareciera convertirse en un paraíso para todo tipo de bandas que operan a través de la red, ya sea para préstamos, inversiones piramidales, pedófilos, agencias de viajes fantasmas, con un ingrediente: la mayoría con sedes fuera de la entidad, ya sea en otros estados o países, donde ninguna autoridad local tiene mayor jurisdicción.
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El vicecoordinador de MORENA en la Cámara de Diputados, Alfonso Ramírez Cuéllar, anduvo en la ciudad de Chihuahua hace menos de 10 días. Pasó muy despichadito, pero no desapercibido. Dentro de los encuentros que sostuvo en la capital, el único que anduvo presumiendo fue la reunión con la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción, en la que mandó varios mensajes desde Los Pinos para los constructores.
Ramírez Cuéllar es una figura cercana a la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum, ya que fue quien mayormente le coordinó alianzas con liderazgos del Barzón, así como grupos de la izquierda, porque en Morena, muchos conocieron la lealtad sólo hasta el último día de AMLO como Presidente, y ahora quien manda en el país busca nuevos puentes de comunicación confiables con sectores estratégicos.
Curioso resulta que el verdadero negociador en la Cámara de Diputados solamente presumiera una reunión con los CMICs y no con quienes representan a su partido aquí, pero bueno, esa ya será plática de otra entrega.
Para acabar pronto, por un lado, Julio Mercado logró amarrar el encuentro en el que Cuéllar les adelantó obras e inversiones de peso para Chihuahua. Solamente falta esperar que no fuera atole con el dedo.
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Los camioneros, los taxistas, los didis, ubers y traileros ya no quieren ser los chivos expiatorios de toda tragedia que se registra en el transporte, público, privado o en cualquiera de sus modalidades, menos sabiendo de lo entreguistas que han sido en los últimos sexenios los líderes de la CTM encabezados por Doroteo Zapata, Francisco “El Güero” Lozoya u otros en cualquiera de sus modalidades, y anda alguien que les quiere bajar el mandado.
La semana que entra andará en Chihuahua Matías “El Incómodo” Prieto Torres, de la Unión Nacional de Transportistas del Cambio (UNTRAC), que tiene dos objetivos en la capital: consolidar células sindicales con didis-ubers y bajarle el mandado lo más posible a los sindicatos de transportistas de la CTM o a los Blancos de Juan Gómez.
Muchos, no pocos, tachan a Matías Prieto de blofear con los números de representados y los alcances que cuando ha venido dice tener, pero también muchos, no pocos, están afirmando que si con la misma fiereza que defiende a los transportistas juarenses defendiera a los chihuahuenses… pues le entran.
La CTM no renovó liderazgos. Hoy paga la consecuencia de no delegar poder y sólo concentrarlo. Juan Gómez, de los Transportistas Unidos, le echa ganas, pero nomás, y los choferes, bueno, y hasta concesionarios, ya nomás buscan quién los defienda y no los ponga como chivitos en el precipicio.
