¿Qué otra cosa se puede esperar de un gobierno que está mucho más preocupado, y ocupado, de las casas que le encuentran a sus funcionarios en el extranjero que de los verdaderos problemas que aquejan al país?
Morena es el partido de lo contradictorio, del resentimiento y del empobrecimiento.
A muchos nos ha quedado bastante claro, desde antes de que Morena llegara al Poder a nivel federal, que el partido se rige por un doble discurso que queda tan ambiguo y tan moldeable que a veces ni entre ellos se ponen de acuerdo.
De hecho, uno supondría que las filas del partido deberían estar llenas de militantes y funcionarios que por ninguna circunstancia participarían o se someterían «bajo el yugo del despiadado imperialismo de “los yankees” neoliberales que únicamente buscan empobrecer y pisotear el territorio nacional».
Pero no, es todo lo contrario. Ya no son solo los viajes en primera clase o los discursos en Europa representando la supuesta “austeridad republicana”, ahora también se suman las casas e inversiones en el extranjero, y sí, las visas canceladas también. El problema no está en que hagan inversiones, compren esas casas o tengan una visa de turista para ir a los Estados Unidos. El problema está en el origen del dinero, y después, en su doble discurso de pedir al pueblo “sabio y bueno” someterse, mientras que ellos se regodean de lujos y riquezas, o sea, “hágase tu voluntad en los bueyes de mi compadre”.
El estatuto de Morena en su artículo 2 inciso b dice así:
La formación de una organización de hombres y mujeres libres y decididos a combatir toda forma de opresión, injusticia, desigualdad, racismo, intolerancia, privilegio, exclusión y destrucción de las riquezas y el patrimonio de la nación;
Combatir toda forma de desigualdad y privilegio está dentro de sus principales objetivos como partido, pero hay aproximadamente 44.2 millones de mexicanos en pobreza laboral, es decir, cerca del 33.9%, y no hay que ser un genio para deducir que esos 44.2 millones de mexicanos no tienen el poder adquisitivo para comprarse un inmueble en Estados Unidos.
Quisiera poder encontrar la relación entre la casa en California del Diputado Arturo Ávila valuada en 4.8 millones de dólares y el combate a la desigualdad y al privilegio.
Ya ni hablemos del combate a la intolerancia, cuando el propio Presidente del Senado en un completo abuso de poder se fue contra un ciudadano por haberlo confrontado meses atrás.
Como dije al principio, es un partido político lleno de contradicciones y para lo único que son coherentes es para mantener o incrementar los niveles de pobreza e ignorancia. Esta es nuestra verdadera austeridad republicana, la falta de medicamentos, la falta de seguridad, la falta de empleo.
Esto es Morena y estos son sus militantes. Una serie de resentidos lo suficientemente inteligentes para desfalcar un país y desmantelar sus instituciones, su democracia y su sistema de pesos y contrapesos.
Pero que no les toquen sus visas, porque ahí sí vuelve su “orgullo nacional”.
