H. Cd. de Chihuahua.- Un nuevo campo de exterminio presuntamente utilizado por el crimen organizado fue descubierto por el Colectivo Amor por los Desaparecidos en la zona limítrofe entre los municipios de Reynosa y Díaz Ordaz, específicamente en el ejido Arturo Flores. El hallazgo ha movilizado a distintas corporaciones policiacas, fuerzas militares y autoridades especializadas en la búsqueda de personas desaparecidas.
Edith González, presidenta del colectivo conformado mayormente por madres de desaparecidos, informó que la localización del sitio se derivó de una denuncia anónima recibida días atrás. Sin embargo, debido a la lejanía y condiciones del terreno, se solicitó el acompañamiento de la Secretaría de Seguridad Pública estatal, la Comisión Estatal de Búsqueda y la Comisión de Atención a Víctimas para realizar la incursión.
Fue durante una segunda intervención, la tarde del miércoles, cuando se logró identificar la finca abandonada como un presunto campo de exterminio. En el lugar se encontraron restos óseos calcinados, fogatas, y un tambo metálico que presuntamente contenía hidrocarburo o aceite, elementos que sugieren la quema sistemática de cuerpos.
Las autoridades consideran este hallazgo como evidencia de las prácticas delictivas de células del Cártel del Golfo, particularmente del grupo conocido como “Metros”, que opera en esa región fronteriza. El sitio fue asegurado para su investigación y procesamiento por personal de la Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas, la Comisión Nacional de Búsqueda y efectivos de la Guardia Nacional, el Ejército y la Guardia Estatal.
Este descubrimiento se suma a otros similares en el estado, donde colectivos de familiares han encabezado búsquedas ante la falta de respuestas oficiales. González hizo un llamado urgente a las autoridades para reforzar los esfuerzos de búsqueda y garantizar la justicia para las miles de víctimas de desaparición forzada en Tamaulipas.
