La Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora (FGJES) investigó un caso de homicidio que causó conmoción en la capital sonorense. Se trató del hallazgo del cuerpo decapitado de un hombre en una vivienda particular, y horas más tarde, el hallazgo de su cabeza dentro de una hielera que abandonaron en los sanitarios de un supermercado. Las autoridades confirmaron que ambos restos pertenecieron a la misma víctima.
De acuerdo con la información oficial, el primer hallazgo ocurrió a las 16:14 horas del domingo en un domicilio de la colonia Floresta, donde se localizó el cuerpo sin cabeza de un hombre. Según testimonios recabados por la fiscalía, la víctima —identificada como tatuador— estuvo conviviendo desde la noche del viernes con el ahora principal sospechoso.
Poco después, a las 18:39 horas, personal de seguridad del supermercado Soriana Progreso, ubicado al sur de la ciudad, alertó a las autoridades sobre una hielera sospechosa que abandonaron en el área de sanitarios. Al revisar su contenido, elementos ministeriales y peritos forenses confirmaron que en su interior se encontró una cabeza humana.
La cabeza venía acompañada por un mensaje escrito, el cual se dirigió hacia el director del Centro de Reinserción Social (Cereso) de Nogales, Fernando Javier Valenzuela Zaragoza, y al director general jurídico del estado, Jesús Abel Guirado Orduño.
Fotografías del operativo que circularon en las redes sociales mostraron al personal forense retirando un contenedor negro del establecimiento, que estuvo escoltado por agentes y trabajadores de la plaza. El personal especializado portaba trajes de protección biológica y guantes, en cumplimiento del protocolo pericial.
La FGJES indicó que, tras el análisis preliminar, se determinó que el cuerpo y la cabeza correspondieron a una sola persona. La línea de investigación principal apuntó a un posible conflicto entre víctima y agresor, presuntamente bajo el influjo de sustancias tóxicas.
La Fiscalía General de Justicia de Sonora informó que continuaron con entrevistas, análisis forense y recolección de datos para integrar evidencia a la carpeta de investigación. El caso avanzó conforme al protocolo, y se informará a la ciudadanía en la medida en que el proceso lo permita. Este hecho ha generado reacciones de alarma entre residentes ante la crudeza del crimen y el uso de un espacio público para abandonar restos humanos. Las autoridades reforzaron la vigilancia en la zona mientras continuaron las diligencias.
Durante los primeros cinco meses de 2025, el estado de Sonora registró un total de 528 homicidios. De esa cifra, 451 casos correspondieron a homicidios dolosos, de los cuales 330 se cometieron con arma de fuego, lo que representó más del 73 por ciento de los asesinatos intencionales en el periodo.
