H. Cd de Chihuahua.- El gobierno de Estados Unidos ha sancionado a 22 empresas ubicadas en Hong Kong, Emiratos Árabes Unidos y Turquía, acusadas de participar en una red internacional que facilita la venta de petróleo iraní, en violación de las sanciones impuestas a Teherán.
Según el Departamento del Tesoro, estas operaciones financieras habrían beneficiado directamente al Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica – Fuerza Qods (CGRI-FQ), una organización clasificada por EUA como terrorista.
Según autoridades estadounidenses, los ingresos no se destinaban al bienestar del pueblo iraní, sino al financiamiento de armamento, misiles balísticos y grupos aliados como Hizbulá.
Las medidas impuestas incluyen el congelamiento de todos los activos bajo jurisdicción estadounidense, la prohibición de transacciones con ciudadanos o empresas de EUA, y la amenaza de sanciones secundarias a cualquier institución financiera extranjera que colabore con las entidades señaladas. Estas acciones buscan cortar el flujo de recursos a la Guardia Revolucionaria y limitar su capacidad operativa en el exterior.
Como consecuencia, las empresas sancionadas enfrentan restricciones severas para operar en los mercados internacionales. Su reputación queda comprometida, pierden acceso a sistemas financieros globales, y se ven limitadas en su capacidad para importar, exportar o recibir capital extranjero.



