
H. Cd. de Chihuahua.- El astronauta estadounidense Jim Lovell, comandante de la histórica misión Apolo 13, falleció a los 97 años. Su nombre quedó marcado en 1970, cuando, tras una explosión en el módulo de servicio, guió a su tripulación de regreso a salvo, aunque la misión original buscaba alunizar.
La frase “Houston, tenemos un problema” se volvió símbolo de aquella odisea. Durante cuatro días, la NASA y el mundo siguieron con tensión cada maniobra, hasta que el reingreso confirmó que los tres astronautas habían sobrevivido.
Lovell fue el primer hombre en viajar dos veces a la Luna, aunque nunca caminó sobre su superficie. La NASA lo despidió como un héroe que convirtió una crisis técnica en uno de los momentos más gloriosos de la exploración espacial.