Un fuerte sismo de magnitud 6,1 estremeció el domingo la provincia de Balikesir, en el noroeste de Turquía, provocando el colapso de alrededor de una docena de edificios, según informaron autoridades locales. El epicentro se localizó en la ciudad de Sindirgi y los temblores se sintieron hasta en Estambul, a unos 200 kilómetros de distancia. Al menos una persona quedó atrapada entre los escombros, mientras los equipos de emergencia se movilizaban rápidamente para realizar labores de rescate.
El ministro del Interior, Ali Yerlikaya, confirmó que cinco personas, incluida una mujer anciana, fueron rescatadas con vida de un edificio derrumbado en Sindirgi. Mientras tanto, en el pueblo cercano de Golcuk, varias casas resultaron completamente colapsadas y el minarete de una mezquita se vino abajo. El ministro de Salud, Kemal Memisoglu, indicó que cuatro personas fueron hospitalizadas, aunque ninguna de ellas presenta riesgo vital.
La Agencia de Gestión de Desastres y Emergencias de Turquía informó que tras el sismo principal se registraron varias réplicas, la más fuerte de magnitud 4,6, e instó a la población a no ingresar a edificaciones dañadas. El presidente Recep Tayyip Erdogan envió un mensaje de apoyo a los afectados, mientras que el alcalde de Balikesir, Ahmet Akin, expresó su esperanza de que el país pueda superar el desastre sin pérdidas humanas. Turquía, situada sobre importantes fallas tectónicas, es una zona altamente sísmica donde este tipo de eventos son recurrentes.
