Lo que brilla son los lugares de esparcimiento, espacios donde las familias puedan reunirse y compartir tiempo de manera sana. Algo que, en la actualidad, se necesita con urgencia.
Lo que huele son los escasos esfuerzos tanto del municipio como de los propios usuarios por mantener estos espacios limpios y en buen estado. Ya que muchos se encuentran en pésimas condiciones.
Lo que apesta es que, además, varios de estos lugares se han convertido en focos de infección: acumulación de basura, personas en situación de calle y animales callejeros infestados de garrapatas, entre otras condiciones que afectan la salud y seguridad pública.