La reforma judicial, esa joya de la corona de la 4T que prometĂa justicia rápida y expedita con jueces electos por voto popular, se ha convertido en un chiste de mal gusto que nadie aplaude. En los juzgados federales de Juárez, las audiencias se retrasan hasta nueve meses, con agendas saturadas que parecen diseñadas para que los casos se pudran en el limbo. Solo dos jueces por tribunal, frescos de su elecciĂłn en junio, intentan domar un monstruo de demandas que incluye disputas laborales maquiladoras y querellas por derechos humanos, pero el resultado es un colapso que deja a vĂctimas esperando como en una fila de puente internacional.
En Bravos y Morelos, las suspensiones se acumulan como los baches en Cuatro Siglos: 36 en uno, 24 en otro, con juzgados civiles que ni siquiera publican listas. QuĂ© visiĂłn tan optimista tuvo quien pensĂł que el voto popular resolverĂa la burocracia sin capacitar a los nuevos tozudos; ahora, con 80 mil asuntos pendientes en la ciudad, la “curva de aprendizaje” es un abismo que engulle justicia. Porque si una audiencia por estupro o secuestro espera nueve meses, ÂżquĂ© esperanza le queda a la frontera de que la ley sea más que un eco lejano?
Y si la justicia patina, Chihuahua se luce con un quinto lugar en el podio de las “atrocidades” nacionales, un ranking que nadie quiere pero que acumula 211 vĂctimas en el primer semestre de 2025, segĂşn monitoreos independientes. Masacres que dejan cuerpos envueltos en cobijas, fosas clandestinas que escupen secretos putrefactos, mutilaciones que erizan la piel y hallazgos que convierten canales en cementerios: 11 masacres, ocho fosas, cinco casos de crueldad extrema, todo en un estado que presume pavimentaciĂłn federal y plantas de asfalto. Juárez, con su cuota de 700 homicidios anuales y 48 secuestros rĂ©cord, contribuye al desfile de horrores que pone a Chihuahua detrás de Guanajuato, Baja California, Michoacán y Jalisco, pero por delante de Zacatecas y Sinaloa.
QuĂ© honor tan pĂcaro: mientras la gobernadora Maru Campos respalda anuncios de Sheinbaum y el PAN sueña estrategias para 2027, la realidad es un quinto lugar que mide no progreso, sino el peso de la impunidad. Porque si las atrocidades son el deporte que nos coloca en el top, ÂżdĂłnde quedan los operativos de Harfuch o las patrullas nuevas de PĂ©rez CuĂ©llar?
Para no cerrar en nota tan negra, un aplauso al gobierno estatal por el sorteo de GeneraciĂłn de Excelencia 2025, donde 6 mil 581 estudiantes de Chihuahua –incluyendo a juarenses de prepa y universidad– entrarán al bombo para premios que podrĂan cambiar un trayecto: laptops, tablets, celulares, relojes inteligentes, bocinas, bicicletas y un auto Ăşltimo modelo como gran premio. Inscritos por calificaciones sobresalientes, los chicos de 15 a 18 años verán su esfuerzo recompensado en un evento que incentiva el estudio en un estado donde la educaciĂłn compite con distracciones letales. QuĂ© alivio ver que, en medio de reformas judiciales que patinan y rankings de horrores, al menos un boleto escolar puede ser un boleto al futuro.