✨ Lo que brilla son los perros guardianes, esos leales compañeros que, además de cuidar nuestras casas de extraños, nos regalan lo más valioso que tienen: su amor incondicional.
đź’” Lo que duele es ver a esos mismos “guardianes” encadenados a casas vacĂas, donde los dueños aparecen solo cada semana o hasta cada quince dĂas. AhĂ quedan, solos, sin agua, sin alimento, sin más consuelo que la buena voluntad de los vecinos que intentan darles un poco de atenciĂłn y cariño.
🤢 Lo que apesta es que muchos de esos perritos desarrollan daños irreparables, tanto fĂsicos como emocionales, y con ello nos recuerdan la peor cara de la humanidad: la indiferencia y la falta de corazĂłn.