
El arribo de Fátima Bosch a Nueva York marcó el inicio de su mandato como Miss Universo 2025, en medio de una controversia que ha puesto en entredicho la legitimidad de su triunfo y el futuro mismo del certamen, motivada por las investigaciones que la Fiscalía General de la República (FGR) mantiene sobre Raúl Rocha Cantú, copropietario de la empresa responsable del concurso.
Al ser abordada por los medios de comunicación en Nueva York, Fátima Bosch respondió con firmeza a los rumores y cuestionamientos: “Cuando hay una verdad clara no es necesario estar defendiéndose constantemente. Sin embargo, al tener una voz, también es importante usarla. Aprovecho este espacio para decir que muchas personas saben que todo lo que se ha dicho sobre mí es completamente falso. Mi triunfo generó polémica, pero cuando alguien rompe moldes y estereotipos, como lo está haciendo hoy Miss Universo, eso suele incomodar”.
La controversia se intensificó tras la renuncia de Omar Harfouch, juez de Miss Universo 2025, quien denunció irregularidades en la selección de finalistas y sugirió supuestos intereses económicos entre Raúl Rocha y Bernardo Bosch Hernández, padre de Fátima y alto ejecutivo de PEMEX. Ante estas acusaciones, Bosch Hernández declaró que es falso que haya favorecido a algún empresario, ya que “Dentro de mis funciones no se encontraba la revisión ni la adjudicación de licitaciones o contratos”.


