Este miércoles, Yuri Belúsov, representante de la Fiscalía General del Estado de Ucrania, anunció que al menos 110 prisioneros de guerra ucranianos han sido ejecutados mientras estaban en cautiverio ruso desde el inicio de la invasión. Estos incidentes incluyen el centro de detención en Olenivka, donde murieron 53 soldados en julio de 2022. La investigación se complica por la falta de acceso a los lugares de los crímenes y a los cuerpos de las víctimas. Belúsov afirmó que las torturas sistemáticas en más de 200 centros de detención rusos demuestran que la tortura es una política estatal integral de Rusia. Ucrania también está investigando la muerte de 62 soldados que intentaban rendirse y fueron presuntamente ejecutados por fuerzas rusas.
